Brad Gauthier, de 38 años, se dio cuenta tras despertarse que le faltaba uno de sus AirPods.
El pasado martes por la mañana Brad se despertó y se dio cuenta de que le faltaba uno de sus AirPods tras haberse quedado dormido con ellos puestos. Brad no le dio mucha importancia a la pérdida ya que pensaba que acabaría apareciendo.
Brad continuó con su vida como de costumbre pero con un ligero malestar en el pecho, de hecho, al intentar beber un vaso de agua se le llenó la garganta y comenzó a atragantarse y, aunque no le dio importancia a este suceso, sí comenzó a dar vueltas al tema del AirPod perdido. Además, Brad relataba que su mujer y su hijo empezaron a bromear con que se lo hubiera tragado y, entre broma y broma, decidió ir al hospital para comprobarlo. Al llegar, los médicos le hicieron una radiografía y… ahí estaba.
«Estaban todos con la mandíbula desencajada, mirando la radiografía, en la pantalla, donde se podía ver con una definición tan clara».
Finalmente, Brad se sometió a una operación algo arriesgada y consiguió volver a casa con su AirPod que, seguía funcionando aunque su micrófono se había dañado.