El amor parece inmortal hasta que deja de serlo, sellar tu amor con un candado es buena idea siempre y cuando sea un amor que perdure.
La leyenda cuenta que la pareja que lo coloca permanecerá siempre unida… o casi siempre. Este es el caso de una estadounidense que decidió sellar su amor con un candado en un puente de Seúl, todo perfecto hasta que se acabó el amor. Después de la ruptura Kassie Yeung decidió recorrer 10.000 kilómetros desde Los Ángeles hasta Seúl para deshacerse del candado.
Media hora y unos alicates le bastaron para romper definitivamente y para siempre su relación. Todo lo podemos ver en un video que grabó la propia protagonista de la historia.