Una mujer pidió una lápida un tanto curiosa y con legado gastronómico.
Esta curiosa petición la realizó Kathryn Andrews, una mujer de Utah, Estados Unidos, que tenía una habilidad magnifica con los postres. Tras ser animada por sus propios hijos, la mujer quiso convertir la receta de una de sus especialidades, dulce de leche, en todo un legado para sus seres queridos.