A día de hoy las aplicaciones para buscar pareja están a la orden del día, pero puede que tengan los día contados gracias a este nuevo invento.
En Japón, particularmente, hay máquinas expendedoras para casi todo y eso incluye parejas. La insólita máquina está ubicada en una pequeña tienda del barrio de Kamata, en Tokio, y hasta los mismos japoneses parecen asombrados, porque las fotos de la máquina se hicieron virales en las redes, con miles de comentarios.
Parece una máquina normal y corriente, pero en su interior no hay botellas de gaseosas, aperitivos o bocadillos. En su lugar se pueden observar unas curiosas latas con una flor, y texto.
Las latas rosas se corresponden con una mujer, y las amarillas con un hombre. Todas cuestan unos 20 euros. En el texto se puede leer la edad de la persona, pero ningún dato sobre su personalidad o características. Solo hay que echar unas monedas en la máquina, y llevarse la lata de la persona que se quiere como pareja. Según cuenta JapanToday, en la lata hay un número de teléfono, pero que no es para ponerse en contacto con la persona elegida, sino con un asesor de la agencia matrimonial Matching Advisor Press, la empresa responsable de la máquina.
La cena se paga a medias. Y aunque no dicen lo que ocurre si no hay compatibilidad, los medios locales especulan en que «seguramente el asesor buscará otra pareja». Si todo va bien y al final hay matrimonio, hay que pagar a la agencia una tasa de 300 mil yenes, algo más de 2.000 dólares.