Los propietarios de Ricco, un gallo Bantam de Bourgoin-Jallieu en el departamento francés de Isère, deben comparecer ante un juez tras la denuncia de una vecina por el fuerte canto del ave.
«Dificultad para concentrarse, falta de sueño, fatiga auditiva», son algunos de los síntomas que menciona la demandante, que llevará a los dueños del emplumado ante los tribunales el 14 de enero de 2025.
La denunciante, que prefiere permanecer en el anonimato, asegura que el soniquete del gallo es insoportable tanto de noche como de día. Sin embargo, los propietarios del pájaro, de 5 años, siempre han rebatido estas afirmaciones. Insisten en que el gallo canta unas quince veces, a primera hora de la mañana, y luego unas cuantas veces más durante el día.