En el mundo de la ciencia, los grandes avances a menudo ocurren por casualidad. Así fue como, en un laboratorio de la Universidad de Tufts, un equipo de investigadores liderado por Marco Lo Presti descubrió accidentalmente un material capaz de formar fibras sintéticas extremadamente adhesivas, evocando las telarañas del icónico superhéroe Spider-Man.
Este hallazgo representa un avance en los materiales sintéticos y abre nuevas posibilidades en campos como la biotecnología, la robótica y la exploración remota. Su enfoque inicial era estudiar una combinación de seda y dopamina, materiales conocidos por sus propiedades adhesivas en entornos húmedos.

Sin embargo, lo inesperado ocurrió mientras el investigador limpiaba cristalería de laboratorio con acetona. Observó que la sustancia que manipulaba comenzaba a transformarse en finas fibras similares a telarañas. Convencido de que había encontrado algo fuera de lo común, compartió su hallazgo con Fiorenzo Omenetto, profesor de ingeniería en Tufts y director del laboratorio Silklab. Omenetto encontró paralelismos con la tecnología ficticia de Spiderman y propuso explorar la posibilidad de crear un adhesivo capaz de capturar objetos a distancia.
Tras varios experimentos crearon una fibra sintética con una capacidad de adhesión extraordinaria, capaz de capturar objetos a distancias de hasta 35 centímetros y levantar pesos de hasta 15 o 20 gramos.