La mayoría, algunos desde muy jovencitos y otros más tarde, es cierto que hay un factor genético y es importante pero también podríamos evitar las canas con 3 trucos.
Según diversos estudios dermatológicos y opiniones de expertos capilares, existen al menos tres factores clave que pueden influir directamente en la aparición temprana de canas.
El estrés: un enemigo silencioso
El estrés no solo afecta la salud mental y física, sino que también tiene consecuencias visibles en nuestro aspecto. Un estudio realizado por la Universidad de Harvard en 2020 demostró que el estrés puede dañar las células madre que regeneran los pigmentos del cabello, lo que lleva a una pérdida prematura de melanina, el pigmento responsable del color.
Uso excesivo de productos capilares
Lacas, geles, tintes, champús con sulfatos… El uso frecuente (y muchas veces abusivo) de productos químicos para el cabello puede dañar su estructura y afectar los folículos. La exposición constante a químicos agresivos puede acelerar el deterioro del folículo piloso, haciendo que el cabello pierda su color natural antes de tiempo. El cuero cabelludo es piel, y como tal, reacciona a lo que le aplicamos. Observa bien lo que compras y te pones en el pelo
Exposición solar sin protección
La radiación ultravioleta (UV) daña las proteínas capilares y acelera el desgaste de la melanina, favoreciendo la decoloración del cabello y la aparición de canas. Al igual que protegemos la piel con protector solar, el cabello también necesita una barrera contra el sol y bien lo puedes hacer con un gorro, un pañuelo, un sombrero o con sprays con filtro UV.