La aplicación móvil que revolucionó el mundo de las citas, Tinder, ha cumplido una década.
Gran parte de su éxito se debe a la forma en la que los usuarios encuentran pretendientes, deslizando a la derecha o a la izquierda, en función de si alguien te gusta o no, lo que convierte la búsqueda en todo un «juego».
Según la aplicación, a lo largo de esta década han tenido 500 millones de descargas y más de 70.000 millones de «matches» (conexiones) en todo el mundo.
La plataforma también destaca que esos deslizamientos o «swipes» han llegado a superar los 4.000 millones en un solo día.
De acuerdo con Tinder, la mitad de sus miembros pertenecen a la generación Z, es decir, entre 18 y 25 años.