España es un país cafetero, con tradición de tomarse un café. esta bebida acompaña al 76% de la población cada mañana al desayunar y esa no es, ni mucho menos, la única taza que se consume en el día. Pero lo estamos haciendo mal… no hay que tomarlo según te despiertas.
Si el café de primera hora no es suficiente para despertarte, el problema es que te lo tomas demasiado pronto. Así, si lo que haces nada más abrir los ojos es tomarte un buen chute de café, no permitirás que tu cuerpo genere esta hormona de forma natural, por lo que acabarás forzando y estresando tu cerebro, ya que necesita tiempo para ir encendiéndose paulatinamente.
Según los expertos el primer café deberíamos tomarlo en la franja de entre 9:30 y 11:30. , es decir, unas tres o cuatro horas después de levantarse para aprovechar todos los beneficios. El cuerpo ya se habrá activado de forma natural y será el mejor momento para darse el gustazo de tomar un buen café.