Cecil es el nombre del perro que cometió esta trastada con la que dejó a sus dueños sin saber que hacer.
Los hechos tuvieron lugar en Pittsburgh, en Estados Unidos. El perro se comió el dinero que se encontraba sobre la encimera de la cocina.
La dueña de Cecil había retirado el dinero de su cuenta de ahorros conjunta para pagar la reforma en su vivienda. Sin embargo, minutos después de volver del banco, su mascota masticó los billetes dejando los billetes destrozados.
Los dueños lo primero que hicieron fue llamar a su veterinario para asegurarse de que el perro no iba a tener efectos secundarios después de comerse los billetes y lo segundo que hicieron fue reconstruir cada uno de los billetes que pudieron encontrar.
Juntando y lavando los pedazos de billetes que pudieron rescatar de las deposiciones del perro y de sus vómitos. En total consiguieron reconstruir unos 3.550 dólares. El banco se comprometió a entregarles de nuevo el dinero, siempre y cuando sea legible el número de serie en el billete.